martes, 30 de diciembre de 2014

Revivals de Wfm y otros al finalizar 2014

2014 marcó el regreso de Martín Hernández al 96.9 de FM, ahora al noticiario matutino de WRadio llamado "Así las cosas". Dar las noticias no es lo suyo. Editorializar la información tampoco. No es que uno añore viejas glorias, ni que esperemos que vuelvan maravillas como el "pavo asesino", todo un clásico de esta temporada. Sin embargo es un hecho que Martín no tiene mucho qué hacer frente a otras opciones informativas radiales. (No que sean buenas, rigurosas o profesionales. Simplemente están consolidadas.)
Como con la salida de Toño Esquinca de MIX (106.5 - Grupo ACIR), al parecer la salida de Brozo agarró desprevenida a la gerencia del negocio radiofónico de Televisa. (No que no se vislumbrara desde el inicio del gobierno peñista, que tarde o temprano ajustaría cuentas con sus detractores, pero eso es otra historia). Así que trajeron a Martín del más allá y éste, a su vez, trajo a viejos conocidos de los micrófonos -Sopitas y Rulo-, y en un dos por tres, ya tenían el nuevo cuadro que reemplazaría al payaso tenebroso y su equipo.
Hace varios años, -1997 quizás-, recuerdo que alguien convocó a un grupo de reporteros en lo que fue el Hard Rock Café en Polanco, aquí en Cd. de México, para una especie de rueda de prensa en la que Martín anunciaría su retiro. Antes de iniciar el evento, hice una escala en el baño y mientras leía cosas en la pared haciendo lo que se hace en el baño, al urinario de al lado llegó un tipo con gorra que amable saludó. La voz inconfundible del millón de pesos. Era el mismo Martín Hernández. ¡Vaya manera de conocer a una leyenda de la radio en México. Haciendo pipí!
Ya en la conferencia de prensa Martín dijo que se dedicaría a proyectos personales y otras cosas que se dicen cuando alguien con un nombre en los medios de comunicación va a dejar la empresa y quiere salir por la puerta principal. Poco después lo escucharíamos por un breve tiempo en Radioactivo e incluso trabajando en algunos proyectos con Luis Gerardo Salas, quien había dejado Rock 101 en 1994 y que es otro de los grandes referentes de la radio contemporánea en México.
Por cierto que en aquella conferencia en el Hard Rock Café, mezclado entre las personas que acudieron a "despedir" a Martín Hernández, andaba un joven publicista y cineasta mexicano que ahí, en una cortísima charla casual, comentó que estaba por lanzar una película. Poco después Amores Perros encendía la mecha de una explosión de talento y propuestas en lo que algunos se aventuraron en llamar la nueva era de oro del cine mexicano. Obviamente eso se quedó más en aspiración que en definición, pero Alejandro González Iñárritu mostraría con el tiempo que lo suyo no sería sólo una incursión caprichosa, sino un proyecto firme, real y genuino de hacer cine, su propio cine.
Tantas personas y tantos caminos que convergen... y ya que mencionamos a ACIR y a Toño Esquinca y al pavo asesino, no podemos dejar de mencionar lo que está sucediendo con Charo Fernández en MIX. La estación está recuperando a la audiencia que se fue con Esquinca a Alfa (91.3 - GRC) y la clave del éxito ha sido el ingrediente de los "especiales mix" de Charo Fernández, un producto que ACIR está comercializando con éxito en todas sus estaciones a nivel nacional. De ello hablaremos en otra entrega.



lunes, 14 de julio de 2014

30 años de Rock 101


 ...long, long time ago I can still remember how that music used to make me smile...

Este año, este verano, Rock101 cumple 30 años de existencia, siendo uno de los mejores escaparates auditivos para regalar al oido -y al intelecto- música e ideas estimulantes.
Sin embargo Rock 101 ya no es -ni esperamos que sea- lo que fue en el principio: una revolución en los medios de comunicación mexicanos, que trascendió el formato, el estilo, la programación y elevó el estándar de la industria radiofónica en México.
Los años de gloria de Rock 101 quedaron atrás. Fue una combinación de factores los que hicieron de aquella frecuencia en el 100.9 de FM lo que era: el momento histórico, nuestra generación, Lynn, Luis Gerardo, Jaime, Dominique, Raymundo Gabriel... y -debemos mencionarlos también-, Jordi e Iñaki...
Mucho se ha escrito ya sobre los porqués y los cómos. Líneas y líneas de catársis dedicadas a invocar al Rock 101 que se nos fue, se han escrito por propios, extraños y por nosotros, los radioescuchas que cada mañana nos asegurábamos que la radio estuviera encendida.

...But something touched me deep inside, the day the music died...

Hubo algunos intentos infructuosos -e inexplicables- de rescatar el concepto, que no vale la pena comentar aquí. Lo importante es que ahora es posible encontrarse nuevamente con Rock101 en la Segunda Odisea, donde Luis Gerardo suele tener un turno en vivo a las 6 de la tarde. A veces no sirve el player del sitio web, aunque la estación está listada también en Tune In, por si desean escucharla en su dispositivo móvil y cuentan con un paquete de datos lo suficientemente ancho y fiable.
Por otra parte también pueden escuchar una colección de cintas recuperadas y digitalizadas que se transmite en el sitio Rock101.com.mx donde aún es posible disfrutar algunas identificaciones de la estación, promocionales e incluso viñetas memorables.

Ambas estaciones en línea tienen sus pros y contras. La Segunda Odisea tiene varios turnos en vivo. Algunas de las voces son nuevas y algunas de ellas de plano dan mucha flojera. Hay por ahí algunas jovencitas que hacen que la estación suene un poco como Reactor, con locutores de altas miras pero con poco talento, no se diga gracia. También hay talento sorprendente como La Hora Internacional, conducida por un viejo conocido nuestro, el extraordinario Héctor Valdés.

Del otro lado, Rock101.com.mx tiene una programación variada y demasiado extensa como para darle a la estación un buen margen de rotación en su catálogo, lo cual la hace muy disfrutable. Sin embargo ha incluido su propia selección musical. Lamentablemente no necesariamente tiene el tino de Luis Gerardo al elegir las canciones que se incluirán, así que si no se tiene precaución uno podría toparse con cosas que no tienen nada qué ver con la esencia de Rock 101. Aquí se escucha material principalmente del periodo entre 1984 a 1994 (incluyendo los intentos fallidos de Jordi de hacer sus propias viñetas, incluso de "rehacer" algunas de las ya existentes, lo cual, dicho sea de paso, documenta muy bien la decadencia, agonía y muerte de la estación).

 ...The world is collapsing Around our ears I turned up the radio But I can't hear it...

Siempre que se enciende la radio se extraña Rock101; sobre todo al encontrarse con una nula oferta de calidad. Las ondas de radio en México están vacías. Por ahí anda William Yarmes dando las efemérides en RED FM. Iñaki dice las noticias en una estación donde también tocan canciones de Yuri y Daniela Romo... -sin comentarios.

Ha habido algunos revivals interesantes de algunos locutores clave de aquella época, lo cual puede ser una muestra de que actualmente no hay más talento que el de locutorcillos torpes que hacen evidente el espacio abismal que separa sus neuronas cada vez que abren el micrófono. Por ejemplo ahora se puede escuchar a Charo Fernández nuevamente, quien está en MIXFM a mediodía, en este intento desesperado de ACIR por recuperar la audiencia que se llevó Toño Esquinca a Grupo Radio Centro. (Por cierto, la nueva generación piensa Esquinca es lo máximo. Ese es el riesgo que se corre cuando no tienes un referente de lo que debe ser buena radio y cuando los únicos parámentros de comparación del público son aberraciones como Ya párate, Mariano o Todo para la Mujer.) ¿Cómo sería si Luis Gerardo tuviera nuevamente una frecuencia de radio?

Rock 101 cumple 30 años y lo que importa es tomarse un rato para escuchar buena música, estimular el intelecto y saber que a pesar de la desolación de creatividad y la falta de propuestas, es posible tener medios de comunicación a la altura de muchas personas que algún día pudieron ver la tierra prometida, sabiendo que es una aspiración alcanzable la de tener una radio mejor que la que actualmente existe. El chiste es buscarla.